Logo Love Aragón

Experiencias singulares
con razón y corazón

David Marqueta, conversación con un gran amigo

Facebook
Twitter
LinkedIn
Email

Hemos estado conversando con un gran amigo cuya voz lleva resonando en Aragón desde hace décadas –a pesar de ser cosecha del 74-. Además de la radio también hemos podido verlo en la pantalla autonómica. Es un gran tipo, de esos con los que merece la pena compartir charrada y tiempo. Se llama David Marqueta y esto es lo que nos ha contado…

 

Para empezar por el principio, ¿cuál es tu lugar fetiche de Aragón?

El ​Refugio de Viadós, sentado en la pradera y mirando al Posets. Pasé varios años como monitor de campamentos en el valle y, desde entonces, todos los años subo para ver ese pedazo de paisaje. ​Es uno de los pocos rincones que nos quedan casi vírgenes. Lo he compartido con amigos, con mi mujer y desde el año pasado con mi hija. Disfruto comprobando qué sienten otros al verlo por primera vez.

David Marqueta, conversación con un gran amigo 4

¿Qué preferencias tienes a la hora de planear una escapada?

​Soy de campo y de montaña, así que todo lo que sea ir a un lugar donde se pueda salir a caminar o hacer bici me vale. Me encantan los sitios con historia y afortunadamente en Aragón estamos rodeados de ellos.  Me condiciona la gastronomía. En esto hemos ganado mucho en los últimos años. Hasta hace poco era fácil encontrarse con sitios cerrados o donde apenas había oferta. Hoy puedes encontrar auténticas sorpresas gastronómicas y a un precio muy asequible. Y poco más, soy muy contemplativo, así que si hay donde mirar, buen rato.

Uno de los rincones que no te canses de visitar…

​El balneario de Panticosa. Es un sitio alucinante donde tienes la montaña en tus narices. Puedo pasarme horas sentado en la orilla del lago mirando los picos que lo rodean. Además contrasta el silencio que lo rodea con el sonido del agua de sus cascadas. Si además estás con ganas, puedes subir hacia los ibones donde encuentras rincones que no tienen que envidiar a los mejores paisajes del mundo.

David Marqueta, conversación con un gran amigo 2

El plan perfecto para recibir a gente que nunca ha estado en Aragón…

Me ha ocurrido varias veces que viene alguien que quiere conocer algo más de Aragón y les propongo contrastes. Por ejemplo, subir un día a Canfranc y al día siguiente visitar Albarracín. Ver las cuevas de Molinos, Mirambel y La Iglesuela del Cid. Otra excursión es descubrir Los Mallos de Riglos, Bolea y el Castillo de Loarre. O visitar Alquézar por la mañana y hacer la ruta del Vero sobre las pasarelas por la tarde. Alucinan. La diversidad de paisajes que tenemos es enorme. Pero lo más de lo más fue lo que hicimos un año para el cumpleaños de un amigo: le regalamos una vuelta turística en avioneta por toda la mitad norte de Aragón. Sin palabras.

 

David Marqueta, en la ciudad de Zaragoza, un día cualquiera, ¿dónde es fácil encontrarte?.

​Por el río. El hecho de haber recuperado las riberas es algo de lo mejor que le ha pasado a esta ciudad en su historia reciente. He visto y recuerdo cómo estaban antes. Habernos reconciliado con este espacio natural en medio de la ciudad es un absoluto regalo. Pero también es muy fácil encontrarme por la Madalena, el Casco o el Gancho. No dejan de sorprenderme esas calles en plena ciudad que parecen traídas de un pueblo. Para mi es uno de los paisajes urbanos más propios que tenemos.

David Marqueta, conversación con un gran amigo 3

Recuerdas la primera vez que estuviste en…

​Pineta. Era muy jovencico, el viaje me pareció larguísimo, pero mereció la pena. Me sobrecogió la montaña. Ese circo estrecho, alto, con el cilindro de Marboré que asoma cuando le dejan las nubes, las cascadas que caen por los lados del valle, los Astazu afilados, que parece que se agarran al cielo. Y el olor a boj y a pino que impregna el valle.

David Marqueta, conversación con un gran amigo 6

Últimas publicaciones

¿Quieres ver todos los artículos?