En la prehistoria ya habitaban por tierras aragonesas artistas que dejaron sus obras en cuevas abarrotadas de animales y figuras que hacen frotarse los ojos a expertos y viajeros que las visitan.
En 1998 el arte rupestre de Aragón fue declarado Patrimonio Mundial por la Unesco, en una candidatura conjunta con Cataluña, Valencia, Castilla La Mancha, Murcia y Andalucía, que constituye el Arte Rupestre del Arco Mediterráneo.
En 2010, el Comité director de Cultura del Consejo de Europa les otorgó también la distinción de ‘Itinerario Cultural del Consejo de Europa’, bajo el título ‘Caminos de Arte Rupestre Prehistórico’.
Nuestras pinturas rupestres se encuentran concentradas en cuatro de los seis Parques Culturales de Aragón:
El Parque Cultural del Río Vero. Un museo al aire libre.
Con sus más de sesenta abrigos de arte rupestre ofrece la oportunidad única de ver en un mismo territorio los tres estilos clásicos del arte rupestre europeo: paleolítico, levantino y esquemático
Desde el Centro de Interpretación del Arte Rupestre de Colungo te acompañarán a visitar diversos abrigos a lo largo de todo el año. Reserva con antelación, lleva buen calzado y prepárate para admirar paisajes únicos, espectaculares sendas y caminos que te llevarán a descubrir las pinturas de los primeros artistas de la humanidad.
Enlace a Parque Cultural Río Vero
Parque Cultural del Maestrazgo
Los dos enclaves patrimonio de la humanidad, el del entorno de Santoles, y el del Barranco Gibert en Mosqueruela, son las manifestaciones rupestres existentes en el territorio del Parque Cultural del Maestrazgo
El Arte Levantino, entre 8000 y 6000 años antes de nuestros días, tiene centeneras de abrigos en las sierras mediterráneas de la Península Ibérica, que se lleva de infinidad de escenas que muestran las formas de subsistencia cotidiana y los ritos de complejas sociedades neolíticas, todavía muy apegadas a la caza y recolección.
Es un arte eminentemente pictórico, aunque cuenta también con grabados como los de la zona de Castellote. Utiliza el color rojo preferentemente. El uso de finos pinceles, dan una gran precisión a los detalles de animales, ropajes, etc.
Aquí tienes el enlace para que amplíes información
Parque Cultural de Albarracín
Su patrimonio natural abarca una extensa masa de bosque de pino rodeno que guarda en sus abrigos una de las mayores concentraciones de arte rupestre post-paleolítico del sudoeste de Europa.
En 1995, se creó el Paisaje Protegido de los Pinares de Rodeno, un título otorgado por la importancia de sus valores naturales, pero principalmente por la ubicación de varios espacios con pinturas de arte rupestre levantino.
Las pinturas rupestres de estos abrigos están consideradas como arte levantino, ya que cuentan con características propias de este arte como son: la figura esquematizada, las escenas cotidianas de pobladores cazadores y recolectores, así como la gran presencia del rojo.
Enlace a más información del Parque Cultural Albarracín
Parque Cultural del Río Martín
Esconde veinte sitios rupestres visitables, la mayor parte abrigos con pinturas de los ciclos levantino y esquemático.
La Cañada de Marco, en Alcaine, propone un recorrido por la historia humana seis mil años atras. En Obón, la presencia de sus primeros pobladores se puede comprobar en las pinturas de Hocino de Chornas, El Cerrao y La Coquinera. Al Hocino de Chornas se puede acceder por un sendero desde Obón.
El modo de vida y las creencias de los primeros habitantes de estas tierras han quedado reflejados en el Frontón de la Tía Chula, de Oliete, en La Higuera del Barranco, en Estercuel, y en Los Pozos Bolletes de Montalbán, pudiendo llegar por un sendero desde Peñarroyas. El Centro de Interpretación del Arte Rupestre de Ariño es el final perfecto para culminar este viaje por el arte rupestre. En Alacón, se puede retroceder al Jurásico y comprobar gracias a sus fósiles marinos que aquí alguna vez hubo un mar tropical, mientras que en Ariño la presencia de dinosaurios queda atestiguada por huellas halladas en su entorno.
Enlace más información Parque Cultural Río Martín
Hay además en todas estas zonas senderos maravillosos para hacer a pie y en bici. Una gastronomía para chuparse los dedos e incluso un balneario donde reponerse de tanta emoción.
¡EN MARCHA!
Fotografías Turismo de Aragón.